¿Cómo aliviar la boca y la garganta seca? Remedios y causas comunes
¿Tienes sed con frecuencia, incluso después de beber agua? Esa sensación constante de sequedad en la boca o en la garganta puede ser más que una simple molestia. De hecho, es un problema que afecta a millones de personas y puede impactar negativamente tu salud si no se trata a tiempo.
Según los Institutos Nacionales de Salud (NIH), alrededor del 21.3 % de los hombres y el 27.3 % de las mujeres padecen resequedad crónica en la garganta. Si tú también formas parte de esta estadística, aquí te explicamos qué hacer y cuándo buscar ayuda profesional.
¿Por qué es preocupante tener la boca seca?
La sequedad bucal crónica va mucho más allá de sentir la boca áspera o pastosa. La saliva cumple funciones vitales:
- Elimina restos de comida de los dientes.
- Neutraliza los ácidos que desgastan el esmalte.
- Protege contra la formación de caries.
- Facilita el habla, la digestión y la deglución.
Cuando hay poca saliva, se multiplican los riesgos de enfermedades bucales, mal aliento e incomodidad constante. Por eso, es importante actuar a tiempo.
Remedios caseros para la boca y la garganta seca
Aunque las causas de la boca seca pueden variar, hay soluciones simples que puedes aplicar en casa para aliviarla:
- Hidrátate regularmente. Beber agua durante todo el día mantiene tu boca húmeda.
- Usa un humidificador. Especialmente por la noche, ayuda a evitar la resequedad ambiental.
- Mastica chicle o caramelos sin azúcar. Esto estimula la producción natural de saliva.
- Evita alimentos secos o salados. Como papas fritas o palomitas, ya que pueden empeorar la sequedad.
- Opta por alimentos hidratantes. Frutas jugosas o jugos naturales pueden aportar humedad a tu boca.
Consejo: Escoge siempre productos sin azúcar para prevenir la aparición de caries.
¿Y si los remedios no son suficientes?
Si a pesar de estas medidas sigues teniendo la boca y garganta secas, tu dentista puede recomendarte tratamientos más específicos:
- Saliva artificial. Disponible en forma de spray o gel, ayuda a mantener la humedad en la boca.
- Pastillas estimulantes. Algunos medicamentos pueden ayudarte a activar el flujo de saliva si tus glándulas aún funcionan.
Posibles causas médicas de la sequedad bucal y de garganta
En ocasiones, la boca seca es solo un síntoma de algo más profundo. Podría estar relacionada con:
- Trastornos autoinmunes como el lupus, la artritis reumatoide o el síndrome de Sjögren.
- Problemas emocionales o mentales, como ansiedad o depresión.
- Déficits nutricionales.
- Efectos secundarios de medicamentos para la presión arterial, el asma o el dolor crónico.
En estos casos, además del dentista, será necesario acudir al médico para hacer un diagnóstico completo y, si es necesario, ajustar tu tratamiento o medicación.
No lo ignores: tu salud bucal está en juego
Si notas que siempre estás sediento o te cuesta hablar, tragar o dormir por la resequedad, no lo tomes a la ligera. La boca y garganta secas pueden afectar tu bienestar general. Consulta a tu dentista para conocer la causa y recibir el tratamiento adecuado. Con ayuda profesional y algunos cuidados en casa, es posible aliviar los síntomas y proteger tu salud bucal.
